¿CÓMO Y POR QUÉ NACE INTERAQUA?

Toda actividad tiene una historia, algo que inspira, motiva y conduce a un objetivo… INTERAQUA tiene una larga historia.

Soy Maye González Estrada, nací en octubre de 1960, pertenezco a una familia de 8 hermanos (yo soy la 7ª). Tere, la 2ª de mis hermanas, nació en mayo de 1952 y cuando contaba con sólo 1.1 años -que empezaba a dar sus primeros pasos- se enfermó de poliomielitis… desde ese momento sólo pudo caminar con muletas. Mi papá, siendo médico, quería darle a Tere la oportunidad de que se ejercitara en el agua para que no se rigidizara su cuerpo y obtuviera todos los beneficios que ésta le podía brindar; la metían cada vez que podían, la llevaban a diferentes albercas que les prestaban, pero era difícil hacerlo con la frecuencia deseada. En 1959 mis padres lograron construir una alberca en la colonia Jardines del Pedregal en la calle de Picacho; en ella convivíamos y disfrutábamos varios días a la semana.

En mayo de 1964 nos cambiamos a esa propiedad en donde crecí. Nadábamos muy seguido, los fines de semana mis papás invitaban a familias a pasar el día; entre semana tomábamos clases o nos metíamos a jugar. Lo fabuloso era que en el agua “todos éramos iguales”, ahí no se sentía la diferencia que había con Tere porque ella podía moverse con gran libertad, le entraba parejo al juego: tiburón, las traes, carreritas o lo que fuera.

Desde pequeña tuve una gran vocación por la enseñanza, mi juego favorito era jugar a la “Maestra”. En 1973 una Maestra me instruyó para ser Instructora de natación y el 3 de septiembre de 1974 comencé a dar clases (estaba a 1 mes y días de cumplir 14 años) y desde aquel día nunca he dejado de impartir clases. La gente se fue enterando de ellas y me empezaron a solicitar que abriera más grupos, por lo que invité a Male (mi hermana más pequeña) a unirse a esta actividad; comenzamos a entrenar a amigas para que nos ayudaran porque ya no nos dábamos abasto. En 1986 Male se va a vivir a Guadalajara y Ceci -la 5ª de la familia- se integra al equipo de trabajo y se retira en 2021. En aquel entonces dábamos clases grupales (máximo 4 niños) a partir de los 3 años. Las mamás nos pedían que los recibiéramos más pequeños, de 1 año, pero nunca lo quisimos realizar porque realmente no sabíamos cómo hacerlo e imaginábamos que los bebés no iban a parar de llorar y sufrir.

De 1987 a 1991 tuve la fortuna de ser mamá de 3 hijos (Juan Carlos, Pedro y Elena De la Fuente González) los cuales metimos mi esposo y yo al agua a partir de los 3 meses de edad y a quienes, a través de la convivencia con ellos, aprendieron a nadar de manera muy amorosa y natural. En 1994, embarazada de mi 4º hijo (Pablo), asistí a una Clínica Internacional de Matronatación (clases para bebés con la mamá o papá en el agua) en la Cd. de Acapulco (ahí tuvimos la fortuna de conocer a grandes personalidades mexicanas de la industria como Beatriz Esesarte, Lulú Cisneros, María Alicia Alfaro, Sergio Chávez, Roberto Strauss, Mónica Anzueto, Nelson Vargas, entre otras). Me certifiqué por la NSSA (actualmente la US Swimming School Asociation) como instructora y arrancamos el programa de Educación Acuática para bebés. También desarrollamos clases de Aquafitness.

En octubre de 1998, por motivo de trabajo de mi esposo, nos mudamos a vivir a la ciudad de Coronado, en San Diego California USA. Al llegar lo primero que hice fue inscribir a mis 3 hijos mayores a clases de natación; al mes los invitaron a formar parte del equipo de natación del condado (CNSA Coronado Navy Swimming Asociation) en donde participaron en competencias a nivel estatal y nacional. Pronto los invitaron a formar parte del equipo de waterpolo y participaron también en torneos estatales y nacionales en donde lograron importantes resultados.

Como Pablo, mi 4º hijo, era pequeño y no quería suspender su desarrollo natatorio, formé grupos y continué dando clases hasta agosto de 2005, año en el que regresamos a la Ciudad de México.

Durante mi ausencia, mis hermanas continuaron dando clases en las mismas instalaciones y en agosto de 2005 se mudaron a la colonia Las Águilas, donde estamos actualmente, y tuve la oportunidad de reinsertarme.

A partir de septiembre del mismo año nos constituimos como una PyMe y nos comercializamos con el nombre de “INTERAQUA Educación Acuática”, escuela que favorece el aprendizaje a través de un método psicopedagógico propio con el cual buscamos que el alumno, en un ambiente de respeto, encuentre su propia relación con el agua y que pueda incursionar en los lagos, ríos, mares.

En 2014 realizamos un trabajo de estandarización del Método Interaqua y de sus sistemas; creamos los Manuales para empezar el crecimiento como marca. En 2018 abrimos la Sucursal de Querétaro que opera con los mismos patrones de calidad de la Ciudad de México.

 La integración de un equipo de trabajo formado por instructoras entrenadas y capacitadas con el Método Interaqua nos ha permitido continuar ofreciendo clases a bebés con sus padres hasta los 3 años de edad; a niños en la etapa preescolar para que vayan descubriendo su cuerpo acuático; a niños en edad escolar que logran aprender de manera divertida y segura los estilos de crol, dorso, pecho y mariposa; clases a adultos que nunca tuvieron la oportunidad de aprender a nadar o que tuvieron una mala experiencia; adultos que desean perfeccionar su técnica; adultos de la tercera edad y adultos que practican Aquafitness (ejercicio en el agua en posición vertical). Muchos años han transcurrido y no dejo de disfrutar de mi trabajo el cual realizo con gran pasión. En Interaqua pensamos que “el agua que se estanca se pudre” por lo que tenemos el compromiso y la convicción de siempre estar mejorando a través del estudio, la observación, la aplicación del conocimiento en los programas, la capacitación, la creatividad para hacer de la natación una experiencia placentera y duradera para toda la vida.